15.10.06

Más de 115 niños gallegos abandonados viven acogidos por familias voluntarias

Hace dos semanas, un niño de dos años moría de hambre en Ponteareas. Su drama y el de su familia dieron la vuelta a la Península. Días más tarde, unos padres secuestraban en Vigo a sus propios hijos, internados en un centro de acogida. Su historia volvió a sacudir Galicia y recordó que la marginalidad, las dificultades económicas y la violencia afectan a menores con más frecuencia de lo que la sociedad piensa. Tanto es así que Cruz Roja y su programa de acogimiento familiar no dan abasto. Empezaron hace once años, y desde entonces han atendido a 667 niños y adolescentes gallegos.
La Voz de Galicia, 15 de octubre de 2006