Un club tan unido como un ovillo
Puede que el ser humano sea gregario por naturaleza, pero hace falta tener algo más en común aparte de caminar erecto para que dos personas puedan desarrollar una relación. Normalmente, la amistad tiene como base un punto de vista y una afición en común.
REPORTAJE DE ABEL PEÑA
De hecho, a partir de dicho pasatiempo o afición se puede llegar a una buena amistad de una forma casi tan fiable como la de llegar a la madeja tirando del hilo. De ahí que los clubs sean una de las formas más seguras de ampliar el círculo de amistades. Aunque los más abundantes sean los deportivos, los hay de todas clases: de ajedrez, de amigos de animales, de caza, de separados -curiosamente no hay de gente felizmente casada- y, desde la semana pasada, el de calceta del Centro Cívico de Artesanos.
Etiquetas: actividades, ayuntamiento, centros cívicos
0 Comments:
Enviar um comentário
<< Home